El Apostolado de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo es una sociedad piadosa en la Santa Iglesia Católica Romana .
Propagamos la Devoción a la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo en el mundo con la intención de lograr el deseo de Cristo de devolver a todos los hombres y mujeres al Padre como una forma de promover la dignidad del valor humano y salvar la vida.
La devoción a la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo no es nueva en la Santa Iglesia Católica. Es tan antigua como el primer Jueves Santo cuando Jesucristo instituyó el Sacerdocio y la Sagrada Eucaristía.
La proclamación de las siguientes palabras en la noche anterior a que Él sufriera: “Este es mi cuerpo, que se entrega por vosotros. Hagan esto en memoria Mía…. Este cáliz es la nueva alianza de Dios sellada con mi sangre que es derramada por vosotros” (Lc 22, 19-20) evocó en los Apóstoles un sublime fervor religioso o reverencia.
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