REQUISITOS PARA CONSAGRARSE A LA PRECIOSÍSIMA SANGRE DE JESUCRISTO.

 

Un devoto debe:

• Rezar por lo menos durante seis meses consecutivos la “Hora de Oración de Getsemaní”, ya sea de manera personal o  en grupo de dos o más personas, con la intención de Consolar y Adorar a Jesucristo Agonizante, durante esta hora de oración. 

• La “Hora de Getsemaní” abarca desde el jueves a las 11:00 p.m. hasta las 3:00 a.m. del viernes, o, al menos una hora entre la medianoche del jueves (12:00 a.m.) y las 3:00 a.m. del viernes.

• Rezar una Novena nueve días antes de su Consagración a la Preciosa Sangre. La Novena puede ser hecha recitando la Coronilla de la Preciosa Sangre por nueve días u otras oraciones.

• Hacer el esfuerzo de hacer un retiro antes de su Consagración. Idealmente este retiro lo organiza el servidor de la devoción para repasar y meditar con los devotos el compromiso, los llamados del Señor en esta devoción, el acto de consagración y las palabras que se dirán al Señor en el mismo.

• Hacer una buena confesión.

• Para Consagrarse, es necesario que el devoto no tenga impedimentos para recibir los sacramentos, es decir, que se pueda confesar y comulgar, para que se encuentre en estado de Gracia al participar en su Consagración.

• Al termino de por lo menos seis meses de haber rezado la “Hora de Oración de Getsemaní”, en el horario establecido, si el devoto desea deberá ser Consagrado a la Preciosa Sangre, dentro de una ceremonia pública litúrgica, para convertirse en un miembro activo de El Apostolado de la Preciosísima Sangre de Jesucristo (APSJ).

• El APOSTOLADO aceptará como miembros a aquellos bautizados y que estén en comunión con la Santa Iglesia Católica y Romana.

• Serán miembros aquellos que se esfuercen en vivir una buena y ejemplar vida cristiana en humildad, castidad, obediencia, servicio y caridad y que estén esforzándose con esfuerzos comunes en llevar una vida más perfecta de pureza, santidad y unidad en la Iglesia.